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tabla de contenidoEl Valle de Guadalupe resplandece con el legado de una década de pasión por el vino. Hace diez años, en el corazón de esta tierra de viñedos y sueños, gracias a la iniciativa de Gustavo Ortega Joaquín, Vinos El Cielo comenzó a escribir su historia.
Hoy, nos llenamos de orgullo al mirar atrás y contemplar el camino recorrido; un camino que celebramos del 25 al 28 de septiembre pasados, marcando no solo un hito en nuestro calendario sino en el corazón de la enología mexicana.
Con una fiesta que resonará a través del tiempo, agradecimos a quienes han sido parte de esta travesía: nuestros fieles clientes, nuestros incansables colaboradores y los amigos que hemos ganado en este viaje. Juntos, no solo hemos construido una marca, sino que seguimos forjando la historia aún no escrita del Valle de Guadalupe.
Vino conmemorativo del 10º aniversario
Durante la celebración, los asistentes fueron testigos de la presentación de la EDICIÓN CONMEMORATIVA DE PERSEUS 10º Aniversario. La añada 2018, una de las favoritas entre nuestros clientes, se vistió de gala en una botella que encapsula la esencia de una década de esfuerzos y sueños hechos realidad.
Lanzamientos de vinos especiales
Pero no nos detuvimos ahí. En una muestra de innovación y excelencia, hicimos el lanzamiento del vino espumoso G&G BLANC DE BLANCS BRUT. Este nuevo miembro de nuestra familia de vinos promete ser el acompañante perfecto para las celebraciones y los brindis que merecen un toque de sofisticación y alegría.
Además, presentamos orgullosamente nuestra nueva área de atención para Socios Wine Club, un espacio pensado para ofrecer una experiencia exclusiva y de alto nivel para nuestros miembros más distinguidos. Y para deleite de los paladares más exigentes, lanzamos el Vino CASSINI 2020, elaborado con uva Primitivo y disponible exclusivamente para nuestros SOCIOS WINE CLUB.
En Vinos El Cielo, cada sorbo es un recuerdo, cada botella es una historia y cada cliente es parte de nuestra familia. Al cerrar este capítulo de nuestro décimo aniversario, no podemos sino sentirnos emocionados y agradecidos. Agradecidos por el pasado, emocionados por el presente y ansiosos por el futuro.
Brindemos juntos por las historias que vendrán, por los vinos que crearemos y por las experiencias que compartiremos. Porque en Vinos El Cielo, cada día es una celebración de la vida y la pasión por el vino y donde estamos escribiendo la historia del Valle de Guadalupe que aún no se ha escrito. ¡Lo mejor está por venir!
